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En el sereno y verde Val do Ulla, una región de Galicia famosa por su rica historia y su paisaje natural impresionante, la camelia no es solo una flor; es el corazón de una revolución en la cosmética natural.

A medida que avanzamos en la vida, nuestra piel comienza a mostrar signos de la edad que, aunque naturales, muchos desean manejar con cuidado y elegancia. Aquí es donde la camelia, una flor con profundos orígenes en Galicia y Asia, se convierte en una aliada inestimable. En este artículo, exploraremos cómo la cosmética natural gallega utiliza este ingrediente milenario para beneficio de las mujeres después de los 35 años, ayudándolas a mantener una piel radiante y saludable.

Desde los exóticos jardines de Asia hasta los escaparates de lujo de la cosmética, la camelia ha trascendido su simple condición de flor para convertirse en un ícono de belleza y elegancia a través de los siglos. Reverenciada en diversas culturas, en Japón simboliza el amor y la admiración, mientras que en China evoca la pureza y la lealtad. Su rica historia y su enigmática presencia la han convertido en protagonista de jardines y poemas, y ahora, en el ingrediente estrella de rituales de belleza de alta gama.